El medidor de flujo METPOINT® FLM se monta fácil y rápidamente, incluso bajo presión. Sus numerosas interfaces simplifican su integración en sistemas de control de procesos ya existentes. Uno de cada tres compresores funciona únicamente para compensar pérdidas de presión. Estos costes pueden evitarse fácilmente. Una de las medidas más efectivas consiste en calcular con exactitud cuál es el flujo volumétrico real. Este dato es la base para numerosos análisis, documentaciones y decisiones de gran importancia.